viernes, 26 de octubre de 2012

Como enseñar a los niños a ahorrar?

Ahorrar es un hábito muy positivo, que nos ayuda a estar preparados ante cualquier eventualidad y también a lograr  metas que nos establecemos.

Ahorrar dinero nos permite en cierto modo ser más independientes, pues podemos adquirir las cosas que deseamos y que posiblemente de otra manera no conseguiríamos. El ahorro nos permite disfrutar y respetar la manera en que conseguimos el dinero. Nos enseña el valor del dinero y su uso en necesidades reales, nos enseña a ser responsables con las finanzas.

Esta es la razón por la cual debemos enseñar a nuestros hijos a ahorrar. Si les enseñas a administrar su dinero, cuando crezca ese niño te agradecerá mucho. Enseñarles no es difícil, solo toma un poco de tiempo y dedicación de tu parte.

Para que el niño vaya aprendiendo, regálale una alcancía y explícale su función, dale sus primeros ahorros, y motívalo regalándole algún objeto cuando el niño la haya llenado. Recuérdale el premio por llenar la alcancía con regularidad. Trata de darle una mesada e Invita a tus familiares a que discretamente le regalen pequeñas cantidades.

Sin embargo, no todo es regalo. Debes enseñarle el valor del trabajo y como conseguir dinero.

Dependiendo de la edad del niño ve indicándole algunas responsabilidades en la casa; hacer las tareas de la escuela, hacer su cama, organizar su habitación, son algunas de las responsabilidades que puede iniciar y por las que tú le des dinero.

Recuérdale la alcancía e intrígalo con preguntas como “¿Cuánto dinero crees que tengas en tu alcancía?”  Si el niño no tiene la mínima idea, enséñale cálculos básicos o alguna manera de llevar un control del dinero depositado. Procura que el niño no destape su alcancía.

Cuando haya llenado la alcancía deja que sea él quien administre su dinero. Explícale que sin trabajo no hay dinero, que no compre por impulso. Enséñale a que analice varias ofertas antes de comprar, pues el objeto que el niño quiere (que en muchos casos son juguetes) puede que tenga un precio menor en un lugar que en otro, le sobraría dinero para otra cosa; háblales también, sobre la diferencia entre monedas y billetes.

No le cumplas todos sus caprichos. Si le das una mesada no le des dinero extra, salvo que el niño se lo haya ganado por haber cumplido con una de sus responsabilidades o haber tenido un logro. Si ya el niño tiene edad para trabajar, motívalo a que tenga un empleo de medio tiempo y asígnale pagos de ciertas facturas de la casa.

Con estos consejos el niño aprenderá a ahorrar y será un adulto financieramente responsable.


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